Las actividades criminales de organizaciones delictivas como el Cártel de Sinaloa repercuten gravemente en el medio ambiente
Tomado de Infobae
Las actividades del narcotráfico tienen un impacto negativo en diversas áreas y sectores de la sociedad. Comúnmente, las autoridades internacionales y nacionales suelen poner énfasis en las repercusiones de la seguridad, la economía, la política, la salud pública e incluso los derechos humanos, pero hay otra área que suele ser poco mencionada: el medio ambiente.
Desde 1970 a la fecha, los cárteles de drogas han sido personajes clave en el avance del cambio climático, principalmente porque las prácticas relacionadas con el cultivo, producción y transporte de narcóticos generan daños significativos a la naturaleza, como la deforestación, la contaminación de suelos y aguas.
Por ejemplo. De acuerdo con el periodista Oscar Balderas, una de las drogas más vinculadas con el aumento desmedido de la temperatura es la cocaína. Con base en el Reporte Global de Cocaína 2023 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el comunicador señala que la producción y distribución de este estupefaciente está contribuyendo a la degradación ambiental.
“Los países del mundo han adaptado sus estrategias contra el CO2 centrándose en el decomiso de tanta cocaína como sea posible. Y como entre el 60 y 70% de toda la cocaína se mueve por mar, la comunidad internacional se ha movido en los últimos años a blindar las aguas”, expuso a través de X, antes Twitter.
Sin embargo, Balderas señala otro punto importante. A raíz de que las autoridades de cada país se han centrado en mejorar su seguridad marítima, organizaciones criminales como el Cártel de Sinaloa y otras han recurrido a la vía aérea para transportar sus productos.
“Hoy, con mayor tecnología para pasar desapercibidos a pesar de su tamaño, el crimen organizado usa aeronaves brutales”, advierte Balderas, mencionando aviones como los Gulfstream Series, los British Aerospace Hawkers o los Beechcraft King Air.
Los aviones contribuyen al cambio climático principalmente a través de las emisiones de gases de efecto invernadero y otras partículas contaminantes. Las aeronaves que más causan daño al medio generalmente son los comerciales de largo recorrido, los privados de lujo, los militares y los de carga.
En general, los aviones más grandes y utilizados para vuelos internacionales de largo recorrido tienen un mayor impacto debido a su alta demanda de combustible.
La ‘narcodeforestación’
Ya sea para la creación de pistas de aterrizaje o para extender sus zonas de plantación. Los cárteles de drogas también son señalados como responsables de gran parte de la deforestación del planeta Tierra; consecuencia de la ampliación sus actividades delictivas, según la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).
Al respecto destaca que la tala ilegal de árboles, conocida como narcodeforestación, también es responsable de otros delitos: extorsión, homicidios, desplazamiento forzado, esclavitud. Balderas señala que este delito ocurre principalmente en la Amazonía de Brasil y Venezuela, la Selva Baja de Perú o la Biósfera del Río Plátano en Honduras. En México, se ha registrado en los estados del occidente como Nayarit, Jalisco, Colima y Michoacán ―zona de operación del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG)―.
Tráfico de animales
En su más reciente informe, la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) da a conocer que el Cártel de Sinaloa está involucrado en el tráfico de la totoaba, una especie en peligro de extinción.
Según se lee en el reporte Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas 2024, el tráfico de esta especie marina, conocida como “cocaína del mar” por su alto valor económico, suele realizarse con grupos del crimen organizado de China.
La totoaba es un pez que se encuentra principalmente en el Golfo de California, también conocido como Mar de Cortés, ubicado entre la península de Baja California y el noroeste de México.
Esta especie está en peligro de extinción debido a una combinación de factores, siendo la pesca ilegal el más significativo. La principal razón detrás de la pesca ilegal de totoaba es la alta demanda en el mercado negro por su vejiga natatoria, considerada un manjar y utilizada en la medicina tradicional en algunos países, especialmente en China. Sin embargo, las autoridades han señalado a los cárteles de drogas como responsables del tráfico de otras especies exóticas.
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